Punto de enlace entre dos mundos
El interés de Carlos Linga por servir de enlace entre México y Alemania se remonta a las primeras décadas del siglo XX, al empezar a organizar en esos años encuentros para la colonia alemana en México. Las actividades culturales de Linga estaban motivadas por la figura de Alejandro de Humboldt, a quien él admiraba de manera especial. En 1934 Carlos Linga fundó la Sociedad México-Alemana Alejandro de Humboldt. Después de un largo proceso de negociación, ésta adquirió una propiedad en Taxco, antigua ciudad productora de plata, a la que Humboldt había visitado durante su estancia en la región. La Casa Humboldt se convirtió en un centro de encuentro e intercambio científico y cultural entre alemanes y mexicanos.
En el mismo año Linga reanimó las actividades de la Sociedad Alemana Mexicanista. En 1955 las dos sociedades fusionaron y conformaron el Instituto Cultural Mexicano-Alemán “Alejandro de Humboldt”. Después de la Segunda Guerra Mundial, Carlos Linga se ocupó de intensificar las relaciones económicas entre México y Alemania. En 1950 intercedió por la supresión de las restricciones comerciales para las empresas alemanas, lo cual conllevó cuatro años más tarde a la fundación de la actual Cámara de Comercio Mexicano-Alemana y a la organización de la primera feria industrial alemana. Linga asesoraba también a periodistas y representantes del gobierno de ambos países. El cambio de nombre de la “Plaza Zehlendorf” en Berlín por la de “Plaza de México” fue en gran parte el resultado de su mediación. En 1958 Linga recibió la Orden del Mérito de Primer Grado de la República de Alemania.